Las hemorroides son muy comunes: lo sufre entre un 30 a un 50% de la población adulta. Básicamente, las almorranas, así también son conocidas, están formadas por un tejido compuesto de venas, arterias y fibras elásticas situado dentro del ano y de la parte inferior del recto. En condiciones normales, este tejido aporta irrigación y protección a la región del ano y recto, e interviene en los mecanismos de defecación y continencia. Cuando estos vasos sanguíneos se inflaman, generan molestias en la zona como irritación y dolor en la zona anal, incluso sangrado.
Si bien no tiene una sola causa, la alimentación tiene un papel preponderante tanto en la prevención como en la cura. En la mayoría de los casos, las hemorroides desaparecen solo con un cambio en la dieta y algún medicamento momentáneo. Solo entre un 5 y un 10 por ciento requerirá algún tipo de intervención.
Dieta rica en fibra
Lo que primero recomiendan los especialistas es que tu dieta sea rica en fibras para evitar el estreñimiento y hacer grandes esfuerzos al defecar, lo que podría generar hemorroides. Esto implica comer frutas, verduras, legumbres y productos integrales, para ablandar las heces. Lo ideal es incorporar de 25 a 35 gramos de fibra por día.
La fibra de los alimentos vegetales no puede ser digerida por el organismo, por lo que no es absorbida en el torrente sanguíneo y no se puede utilizar para obtener energía. Hay dos tipos: soluble e insoluble. La soluble forma un gel cuando se mezcla con agua lo que ayuda a crear heces más voluminosas y suaves, reduciendo el riesgo de estreñimiento. Mientras la fibra insoluble, que no se disuelve en agua, pasa los intestinos directamente y ayuda a empujar los alimentos a través del tracto intestinal rápidamente, previniendo el estreñimiento.
Uno de los principales mitos sobre los alimentos ricos en fibra es que son secos e insípidos. Es real que un alimento integral, en principio, no ofrece un festival de sabor pero el secreto es agregarlo a la dieta, de poco en poco. Algunos alimentos ricos en fibra son:
- Avena
- Linaza
- Guisantes
- Alubias
- Cebada
- Manzanas
- Peras
- Ciruelas
- Zanahorias
- Bayas
- Psyllium
Cómo incorporar fibra a la dieta
Para realizar cualquier cambio en la alimentación, es primordial ser conscientes de lo que comemos. Algunos tips simples para llevar adelante:
- Comer al menos cinco porciones de frutas y verduras por día. Como postre, en ensalada, entre comidas, como plato principal.
- Refrigerios: en vez de ingerir galletas saladas entre comidas, puedes probar con comer palitos de apio, de zanahoria o una fruta (manzana o pera, con cáscara).
- Salvado de trigo. Aumenta la velocidad de las heces a través del intestino. Se lo puede agregar al yogur, a la leche, a un batido de frutas, mezclarlo con cereales de desayuno o usarlo como ingrediente para elaborar bizcochos y demás repostería casera. No se deben superar los 30 g diarios de salvado de trigo.
- Reemplaza panes blancos, pastas y galletas saladas por versiones hechas con harinas integrales, trigo sarraceno, entre otros, para aumentar la cantidad de fibra insoluble. La avena cocida y la cebada también te darán fibra soluble.
- En vez de comer pan blanco simple para el desayuno, elige un paquete de avena instantánea (tiene el doble de fibra y la mitad de las calorías).
- Espolvorea salvado de avena o germen de trigo en ensaladas y sopas.
- Cuando comas manzanas, peras, ciruelas y papas ¡no les quites la cáscara! Allí hay fibra insoluble, así como flavonoides que pueden ayudar a controlar el sangrado de hemorroides.
- Los alimentos de colores vivos (bayas, uvas, tomates y col rizada y otras verduras de hoja verde) son generalmente ricos en flavonoides. Y cuanto más frescos, mejor. Trata de comerlos, sin sacar las pieles o las hojas hasta que estén listos para comerlos. Evita cocinar hasta el punto de que su color se desvanezca.
- Una porción de fruta a menudo es buena para al menos el 10% de tu fibra diaria, generalmente de 3 a 4 gramos. Una taza de verduras de hoja verde, brócoli, coles de Bruselas, calabaza de invierno o guisantes verdes te dará de 4 a 5 gramos de fibra.
- Algunas verduras y frutas tienen fibra y mucha agua. Los pepinos, el apio, los pimientos suaves y la sandía son principalmente agua, más del 90%.
Lo que NO debes comer
Los alimentos con poca fibra pueden causar o empeorar el estreñimiento (y que son alimentos perjudiciales para las hemorroides), por lo que es mejor limitar la cantidad que comes de ellos.
- Pan blanco
- Leche, queso y otros lácteos.
- Carne
- Alimentos procesados como comidas congeladas y comida rápida
- Comida picante
- No te excedas con la sal
Además, es muy importante beber al menos dos litros de agua por día. Hacer ejercicio regularmente y evitar esfuerzos son dos consejos útiles.
Referencias
- https://www.healwithfood.org/hemorrhoids/diet.php
- https://www.niddk.nih.gov/health-information/digestive-diseases/hemorrhoids/eating-diet-nutrition
- https://www.health.harvard.edu/blog/6-self-help-tips-for-hemorrhoid-flare-ups-201307196496
- https://www.health.harvard.edu/newsletter_article/6-ways-to-enjoy-fiber-in-your-diet
- https://www.webmd.com/digestive-disorders/best-worst-foods-hemorrhoids
- https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-hemorroides-13072121